Las diferentes eras por las que hemos pasado como humanidad van desde la prehistoria, pasando por diferentes épocas en las que hemos estado ocupados buscando alimentos, comercio, conocimiento científico, religión, entre otros. Hoy día, teniendo ya muchas de esas cosas “resueltas”, pasamos mucho de nuestro tiempo buscando sentirnos bien con lo que hacemos, tener satisfacción y tranquilidad. Esto es a lo que llamamos bienestar, al estilo de vida que nos hará sentirnos en condiciones físicas y mentales estables.

Muchas veces iniciamos esta búsqueda cuando llegamos a cierta edad, luego de haber logrado algunos pendientes tradicionales de nuestra sociedad. Pero hoy día cada vez más personas jóvenes se dan cuenta de la importancia de tener bienestar en sus vidas, que lo hacen parte de su estilo y cotidianidad. Probablemente lograr bienestar en nuestras vidas tenga significados diferentes según nuestro entorno y nuestra edad. Sin embargo, en sentido general debemos combinar de una manera equilibrada nuestra salud física y mental. Básicamente este equilibrio se logra con una rutina de ejercicios, dieta, buena distribución de nuestro tiempo y nuestras actividades socioeconómicas. 

Salud física, ejercicios.

Desde siempre hemos sabido que nuestro cuerpo necesita ejercitarse con cierta frecuencia. La recomendación de los expertos es una hora de ejercicios diario, pero seamos honestos, nuestros día a día no nos permite darnos ese lujo en esta era del bienestar. Toma en cuenta que más vale poco que nada, busca al menos diez minutos diarios para empezar a crear el hábito, quizás viendo videos en YouTube o caminando en los alrededores de tu casa. Después con el tiempo quizás tengas la oportunidad de ir incrementando el tiempo dedicado a tu entrenamiento físico. Si logras sacar una hora diaria, lo ideal sería que entrenaras con profesionales, un instructor certificado en un parque al aire libre, o un entrenador en un gimnasio.

Usa la ropa adecuada para hacer ejercicios, esa ropa que no solo te hace sentir cómoda, sino que también absorbe el sudor y mantiene tu piel sana; ¿y por qué no? ropa que te quede bien y que te haga sentir bonita. Nada de ropa vieja y fea para hacer ejercicios. Aquí en Intimonadas tenemos ropa deportiva bonita, de muy buena calidad y buenos precios.

Salud física, alimentación.

Para nadie es un secreto que en la alimentación está la vida; una buena dieta será el combustible perfecto para nuestro cuerpo. Toda la actividad física y mental que debemos hacer se verá fortalecida por los alimentos que ingerimos. Una dieta balanceada rica en fibra y baja en grasa nos ayudará a un buen funcionamiento de todo nuestro organismo. Sin embargo, en la era del bienestar no tenemos tanto tiempo para dedicarnos de lleno a tener una buena alimentación. Trata de ingerir alimentos naturales cocidos el mismo día, puedes iniciar haciéndolo un par de días a la semana, y luego extender los días según se vaya haciendo costumbre

El acompañamiento de un profesional vale oro aquí, pues nuestro estilo de vida y otros factores de salud juegan un papel importante. Los nutricionistas son los encargados de calcular las cantidades y combinar la variedad de alimentos que debemos ingerir y que nos aprovecharán adecuadamente. Recuerda que todos los organismos son diferentes y por ende tienen necesidades distintas.

Equilibrio socioeconómico

Aquí el reto es bastante grande, pues dedicar suficiente tiempo a la familia mientras tratamos de alcanzar el éxito en nuestras labores económicas no es nada fácil. Cada día necesitamos más dinero no importa lo hagamos o dejemos de hacer; sencillamente todos necesitamos más dinero. Conseguir dinero, de cualquier manera que lo hagamos, requiere tiempo; en algunos casos más tiempo que en otros, dependiendo de la actividad económica, pero en todo caso es tiempo; y mientras más dinero necesitemos, más tiempo debemos invertir. Del otro lado tenemos la familia, que necesita también que le dediquemos tiempo, y en este caso el tiempo debe ser de calidad. La familia, ha sido a través de los tiempos, pilar fundamental de la sociedad, y lo seguirá siendo.

Lo ideal sería que pongas límites en tu horario de trabajo para poder organizarte y dedicar a cada uno el tiempo adecuado. Pero seamos bien realistas, y no olvidemos que quizás nuestro jefe tiene otra cosa en mente, y esta contando con nosotras para alguna que otra hora extra, o para cualquier consultica un domingo en la tarde. No hay problema, contesta esa llamada fuera de horario, haz tus horas extras cuando sea necesario, pero no hagas hábito de ello. Deja bien claro que estás disponible para cuando la empresa (tuya o de tu jefe) te necesite, pero que esa necesidad debe ser de peso para justificar que trabajes fuera de tu horario.

Si tu determinas que esas horas extras que te piden hacer ahora, es porque un departamento no hizo su trabajo como lo tenía que hacer, o no lo hizo a tiempo, NO trabajes horas extras; si te das cuenta de que esa llamada en fin de semana es para preguntar algo que puede esperar el lunes, díselo a esa persona; si tienes la repuesta a la mano respóndele, pero hazle saber que eso podía esperar el lunes.

Un empleo, un cliente siempre podrán reemplazarte con otra persona, pero tus hijos, tu esposo, tus padres y tus hermanos no pueden hacerlo.

Belleza

Finalmente, en esta era del bienestar debemos hacer todas estas actividades bellas. La belleza nos da autoestima. No les niego que cuando me veo bonita al espejo me siento bien. Hay que trabajar para vernos bonitas siempre, o por lo menos la mayoría del tiempo. Con toda seguridad quienes nos ven bonitas también se sienten bien. Con nuestra belleza aportamos a conseguir nuestro bienestar, y el de las personas que nos rodean. Así que estar bonita es nuestro nuevo deber en esta era de bienestar. ¡Como si todo fuera poco!

Yo estoy creando los hábitos. ¿y tú? ¿Qué tal estas en la búsqueda de tu bienestar?